En Perú, los paisajes forestales –que ocupan el 60 % del territorio nacional– albergan la mayor parte de su riqueza biológica, son fuente de servicios ecosistémicos, y evidencian la relación entre estos y los pueblos ancestrales que los manejan. Esta relación con sus territorios tomó décadas en ser reconocida de manera oficial. Parte de esa reivindicación dio lugar a un nuevo modelo de cogestión del territorio: las reservas comunales.  

En 1988 se estableció la primera reserva comunal de Perú en los territorios ancestrales del pueblo indígena yanesha, en la selva central del país, con el fin de conservar la fauna y flora silvestre en beneficio de la población local. Esta nueva figura no solo ayudó a las comunidades a proteger mejor sus territorios y recursos frente al avance de la colonización y otras amenazas, sino que también les dio un mayor protagonismo en su manejo. En 2006, el Estado peruano –a través del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) – estableció por primera vez en la reserva comunal Yanesha, un modelo de manejo territorial colaborativo fundamentado en objetivos comunes con las comunidades indígenas locales, representadas por los Ejecutores de Contrato de Administración (ECA).   

Los ECA y sus comunidades socias son los pilares de la conservación de casi cinco millones de hectáreas de áreas protegidas y de sus territorios comunales. Su trabajo se desarrolla en el marco de un contrato de administración mediante el cual el Estado les reconoce responsabilidades sobre la ejecución de funciones de administración y planes de manejo, en colaboración con el Sernanp.   

Hasta la fecha, se han establecido diez reservas comunales, todas en la Amazonía peruana, y su modelo de administración es un ejemplo de que los Pueblos Indígenas pueden trabajar con el Estado hacia beneficios comunes. Sin embargo, la cogestión presenta desafíos y su desarrollo es un proceso en constante evolución y coaprendizaje.   

Para apoyar una cogestión equitativa y efectiva de las reservas comunales, se ha lanzado “¿Cómo vamos? Una herramienta para reflexionar sobre los procesos, avances y prioridades en la cogestión de nuestras reservas comunales”. La publicación y metodología es producto de un trabajo colaborativo entre la Asociación Nacional de Ejecutores de Contrato de Administración de las Reservas Comunales del Perú (ANECAP), los ECA de las diez reservas comunales existentes, el Sernanp, e investigadores e investigadoras del Centro para la Investigación Forestal Internacional y Centro Internacional de Investigación Agroforestal (CIFOR-ICRAF), de la Universidad de Sussex del Reino Unido y de la Pontificia Universidad Católica del Perú.  

Múltiples ventajas   

En el proceso del trabajo en la cogestión, que se desarrolla en escenarios complejos y cambiantes, han surgido muchos aprendizajes, así como nuevas oportunidades y desafíos. Por ello, fortalecer los procesos de la cogestión resulta fundamental. Al igual que una versión anterior de la herramienta desarrollada por un equipo de CIFOR-ICRAF y del Sernanp para promover procesos más equitativos y efectivos en los Comités de Gestión de las áreas naturales protegidas del Perú, la nueva versión de ¿Cómo Vamos? para la cogestión de reservas comunales, invita a los socios de la cogestión a reflexionar y aprender sobre lo que se ha estado haciendo bien y sobre lo que no va tan bien. Este ejercicio permite examinar el progreso hacia su objetivo (u objetivos), e identificar los desafíos y oportunidades que surjan. Como resultado, la herramienta apoya la adaptación del trabajo hacia la mejora de la coordinación, participación y toma de decisiones relacionadas con la cogestión, de manera que esta pueda ser equitativa y efectiva.   

“Es importante mencionar que esta herramienta nos orienta a un buen y efectivo desempeño en un proceso de ejercicio intercultural de gobernanza en las reservas comunales que fortalezca la cogestión”, señala Fermín Chimatani, presidente de ANECAP, organización indígena que articula, promueve y facilita los ECA. 

Por su lado, Werhner Atoche Montoya, especialista en fortalecimiento para la gestión participativa de reservas comunales del Sernanp destaca que “el modelo de cogestión expresa los esfuerzos por fortalecer la gestión de las áreas naturales protegidas a partir de un pacto con los Pueblos Indígenas, por lo tanto, con la herramienta “Como Vamos” se articulan los intereses, conocimientos y prácticas de las comunidades socias con los modelos de conservación, consolidando la alianza entre los Pueblos Indígenas y el Estado”.  

El uso de la herramienta puede brindar múltiples ventajas para la implementación y desarrollo continuo del modelo de cogestión. Al ser participativo, el monitoreo es más transparente; ayuda a planificar actividades más efectivas y equitativas; desarrolla capacidades para implementar, monitorear y evaluar proyectos; mejora el acceso a la información, aumenta la transparencia y refuerza la rendición de cuentas entre los actores principales de la cogestión. Además, visibiliza las propuestas de los grupos más vulnerables en los territorios asociados a las reservas comunales.  

Proceso participativo  

El desarrollo de ¿Cómo Vamos? para la cogestión de reservas comunales involucró a los principales protagonistas de estas, incluyendo a los ECA, y a las jefaturas del Sernanp. Se llevaron a cabo entrevistas con los presidentes de los ECA, la directiva de ANECAP, ONG aliadas de ANECAP, y representantes del Sernanp y de las jefaturas de las reservas comunales. Además, se validó la herramienta con los ECA de la Reserva Comunal El Sira y la reserva comunal Yanesha.  

A diferencia de otras herramientas, ¿Cómo Vamos? para la cogestión de reservas comunales se diseñó con una lógica de monitoreo participativo y aprendizaje reflexivo. Es decir, está diseñada para que sea implementada por los ECA, en coordinación con la jefatura de la reserva comunal. A través de afirmaciones y preguntas se facilita el proceso de reflexión y ayuda a las personas y organizaciones involucradas con el funcionamiento de las reservas comunales a identificar los aspectos que se han trabajado para lograr una mejor participación de los Pueblos Indígenas. Asimismo, invita a una reflexión general que incluye aquellos aspectos que deben mejorarse.  

Esta herramienta específica para las reservas comunales es parte de una “caja de herramientas” para el aprendizaje adaptativo y reflexivo de CIFOR, parte de CIFOR-ICRAF, para procesos de gobernanza de paisajes más inclusivos y resilientes. Entre los recursos se incluyen una herramienta genérica para foros multiactor; una herramienta con enfoque de género para reflexionar y aprender sobre gobernanza territorial en Perú, y una para el aprendizaje reflexivo y monitoreo de los comités de gestión de las ANP.   

Para obtener más información sobre este tema, puede ponerse en contacto con Juan Pablo Sarmiento Barletti en j.sarmiento@cifor-icraf.org o Tamara Lasheras en t.lasheras@cifor-icraf.org 

La metodología “¿Cómo vamos?” se desarrolló en el marco del Estudio Global Comparativo de CIFOR, parte del CIFOR-ICRAF, sobre REDD+. La herramienta “¿Cómo vamos?” para la cogestión de reservas comunales es producto de una colaboración entre la Asociación Nacional de Ejecutores de Contrato de Administración de las Reservas Comunales del Perú (ANECAP), los ECA de las diez reservas comunales existentes, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), e investigadores e investigadoras de CIFOR-ICRAF, la Universidad de Sussex del Reino Unido y la Pontificia Universidad Católica del Perú.