Durante las últimas décadas, la mayoría de las exportaciones de madera tropical han provenido de bosques ricos en dipterocarpáceas de Indonesia y Malasia. Las políticas dirigidas para asegurar que la producción de madera de esos bosques sea sostenible, se enfoca en prohibir el aprovechamiento de árboles con un diámetro mayor del mínimo regulado y asegurar que solo una vez cada 30 o 35 años se explote la madera en un lugar. También promueven que las compañías planten árboles y eliminen la vegetación que crece debajo de los árboles para ayudarles a crecer.

A pesar de estas reglas, la producción maderera en estos países ha probado ser no sostenible y los bosques están siendo destruidos rápidamente. Eso sucede en parte porque las empresas madereras no cumplen las leyes y porque entran los agricultores para talar los bosques y sembrar cultivos. Encima de todo, ahora los científicos dicen que las normas existentes no son lo suficientemente estrictas para asegurar que la producción de madera sea sostenible y que algunas hasta puedan tener impactos dañinos.

De acuerdo al documento "Hacia un manejo sostenible de los bosques mixtos de dipterocarpáceas del Sureste de Asia: Yendo más allá de un enfoque de diámetro mínimo de corte", publicado por P. Sist, R. Fimbel, D. Sheil, R. Nasi, y M.H. Chevallier en Environmental Conservation, aún si las compañías fueran a seguir las leyes existentes la explotación no sería sostenible. Con base en sus extensos datos experimentales, concluyen que los madereros tienen que cosechar menos árboles y dejar los bosques por períodos más largos antes de volver a explotarlos. Además, tienen que dejar por completo de cortar especies con poblaciones bajas y los árboles más grandes, y evitar despejar áreas grandes. También deben adoptar prácticas de aprovechamiento de bajo impacto para evitar dañar los árboles restantes, los hábitats y los suelos. De lo contrario, no se podrá cosechar madera de estos bosques de forma sostenible.

Los autores dicen que las empresas deben abandonar el despeje de la vegetación del sotobosque después del aprovechamiento, porque eso puede destruir el hábitat de los insectos que polinizan los árboles. De forma……general, las normas de la silvicultura deben prestar más atención a las condiciones que necesitan los árboles para reproducirse, sobrevivir en sus primeras etapas de crecimiento, y mantener la diversidad genética, y al papel que juegan los animales en esos procesos.

Las implicaciones de este estudio son serias. Los gobiernos afrontan problemas enormes para hacer cumplir las leyes existentes. Ahora resulta que incluso aún si ellos tuvieran éxito, eso no sería suficiente. Aún no está claro como las recomendaciones de los autores afectarían la rentabilidad de las empresas. Lo que sí está claro es que la forma actual de hacer las cosas, simplemente no puede continuar.